Lecturas de hoy viernes 12 de agosto 2022.
Primera lectura de la profecía de Ezequiel 16, 1-15. 60. 63.
El Señor me habló y me dijo: “Hijo de hombre, dile a Jerusalén tu pecado. Hablale en mi nombre: “La tierra en la que naciste es la ciudad de Canaán. Tu padre es amuri y tu madre es hitita. El día que naciste no te cortaron el ombligo, ni te bañaron, ni te untaron con sal, ni te envolvieron. Nadie te tiene lástima por prestar ninguno de estos servicios y sigues tirado en medio del campo, pues has causado tanto disgusto en tu cumpleaños.
Paso junto a ti, te veo sangrando y te digo, cuando estés manchado de sangre: Vive y crece como la hierba del campo. He crecido y madurado hasta convertirme en una mujer. Entras en la pubertad, se forman los pechos y crece mucho el pelo. Pero estabas desnudo y cubierto de vergüenza. Me volví hacia él y vi que había llegado a la edad del amor. Despliego mi manto sobre ti y te cubro con él. Hice con vosotros un pacto con juramento, habló el Señor, y vosotros sois míos.
He lavado tu sangre y te he ungido con aceite. Te di vestidos bordados, lindas sandalias, una pajarita de lino y un abrigo de seda. Decóralo con joyas: pulseras, collares. Usa un hermoso anillo, aretes y tiara en tu cabeza; Lleva baratijas de oro y plata y túnicas de lino, seda y bordados. Comí trigo, miel y buen aceite. Estás cada día más hermosa, tan hermosa como una reina. La fama de tu hermosura se ha extendido entre las naciones, porque dijo el Señor: Te he llenado de magia.
Entonces eres en vano a causa de tu belleza, usa tu fama para ser una puta y entregarte a todo el que pasa. Pero me acordaré del pacto que hice contigo cuando eras joven, y haré contigo un pacto eterno, para que siempre recuerdes tu pasado, insolente, y nunca abras tu boca para jactarte, y cuando. Te perdono por todo lo que has hecho. Así dijo Dios Todopoderoso.
Salmo responsorial 12, 2-3. 4bcd. 5-6. Tu cólera ha cesado y me has consolado.
Él es mi Salvador y mi Dios:
te confiaré y no temeré,
porque El es mi poder y mi fuerza,
él fue mi salvación.
Y sacarán aguas con gozo
de las fuentes de la salvación.
Tu cólera ha cesado y me has consolado.
Den gracias al Señor,
invoquen su nombre,
cuenten a los pueblos sus hazañas,
proclamen que su nombre es excelso.
Tu cólera ha cesado y me has consolado.
Para el Señor tañed, que hizo proezas,
anuncien a toda la tierra;
griten jubilosos, habitantes de Sión,
qué grande es el Santo de Israel en medio de ti.
Lectura de hoy 12 de agosto 2022
Lectura del santo evangelio según san Mateo 19, 3-12
En ese momento, algunos de los fariseos se acercaron a Jesús y le pidieron que lo atrapara: “¿Tiene el hombre derecho a divorciarse de su mujer por cualquier motivo? Y respondió Jesús: ¿Ustedes no se han puesto a leer que desde los inicios, el hombre y a la mujer fueron creados por el Creador, y dijo: Por lo tanto, el hombre deja a su padre y a su madre y toma a su mujer, y ambos seréis uno? De tal modo que ya no son solo dos, sino uno solo”.
Por lo tanto, nadie puede separar lo que Dios ha unido. Dijeron: Entonces, ¿por qué Moisés ordenó al esposo que le diera a su esposa un certificado de separación al divorciarse? Y dijo el Señor: “Por esta dureza de vuestros corazones, Es que Moisés les permitió abandonar a sus esposas; pero al principio esto no fue así. Os declaro que cualquiera que se divorcia de su mujer, a menos que esté en un matrimonio ilegal, y se case con otra , comete adulterio.
Esto dijeron los discípulos: Si un hombre tiene tal actitud en relación con su esposa, entonces no le está autorizado casarse. Y el Señor les dijo: No todos son capaces de comprender estas enseñanzas, sino que sólo aquellos a quienes se les han dado el don. Hay hombres que nacen sin poder casarse. Otros han sido mutilados por los hombres, y hay otros que han renunciado al matrimonio por causa del reino de los cielos. Que la gente sea capaz de entenderlo”.
Comentario del evangelio de hoy
En el evangelio de hoy nos habla de la enseñanza de Jesús que es muy clara y que defiende la dignidad del matrimonio como unión de amor, es decir, de fidelidad. Lo que permite a las parejas mantener la unidad de su matrimonio es el amor del don recíproco respaldado por la gracia de Cristo. Por el contrario, si prevalecen los intereses personales del cónyuge, su unión no será viable.
Y en esa misma página de la Biblia nos recuerda, con gran realismo, que los hombres y las mujeres, llamados a experimentar la relación y el amor, pueden hacer gestos que los lleven a la crisis, al pánico agónico. El trato de Dios con aquellos que no han sido leales a nosotros, es decir, a nosotros, nos enseña que el amor herido puede ser sanado por la misericordia y el perdón de Dios.
