Lecturas de hoy 29 de abril 2023.
Primera lectura de hoy de la primera carta del apóstol san “Juan 1, 5-2,2”.
Queridos hermanos: Este es el mensaje que oímos de Jesucristo y os predicamos: Dios es luz, y en él no hay tinieblas. Si nosotros decimos que en comunión estamos con él y vivimos en tinieblas, entonces mentimos y en la verdad no andamos. Pero si en la luz andamos como él está en la luz, entonces comunión tendremos, y lo que es la sangre de Jesús, Su Hijo, lavará todo lo que es nuestros pecados. Si decimos que no hemos pecado, entonces nos engañamos pensando que la verdad no está en nosotros.
Enonces si nosotros confesamos lo que son nuestros pecados, entonces el Dios justo y fiel perdona lo que son nuestros pecados y nos limpia de toda maldad. Si decimos que no hemos pecado, lo hacemos mentiroso y su nombre no está en nuestro corazón. Hijos mios, les escribo esta carta para pedirles que no cometan pecados. Pero si alguno peca, tenemos un Abogado ante el Padre: el justo Jesucristo. Él fue el sacrificio expiatorio por nuestr os pecados, no solo por nuestros pecados, sino por los pecados de todo el mundo.
Salmo responsorial de hoy 102, 1b-2. 8-9. 13-14. 17-18a. Bendice, alma mía, al Señor.
Bendice, alma mía, al Señor,
y a su santo nombre todo mi ser.
Bendice, alma mía, al Señor,
y no olvides sus beneficios.
Bendice, alma mía, al Señor.
El Señor es compasivo y misericordioso,
A la ira lento y rico en lo que es la clemencia.
No está siempre acusando
ni guarda rencor perpetuo.
Bendice, alma mía, al Señor.
Como ternura un padre siente por sus hijos,
el Señor siente ternura por aquellos los que lo temen;
porque él conoce nuestra masa,
se acuerda de que somos barro.
Bendice, alma mía, al Señor.
La misericordia del Señor
dura desde siempre y por siempre,
para aquellos que lo temen;
su justicia pasa de hijos a nietos:
para los que guardan la alianza.
Lectura del santo evangelio según “san Mateo 11, 25-30”.
En ese momento Jesús habló y dijo: “Señor padre del cielo y también de la tierra, te doy gracias porque tu mismo has escondido estas cosas de los que son sabios y entendidos y se las has revelado a los que son pequeños. Sí, Padre, tú lo crees. “Todas las cosas me han sido otorgadas por mi Padre”, “y nadie sabe del Hijo sino el Padre”, “y ninguno conoce al Padre” “sino el Hijo y a quienes el Hijo se lo quiere revelar”.
Venga hacia mí todos los que estáis cargados y trabajados, y yo mismo os aliviaré de los que son las cargas. Lleven mi yugo sobre ustedes y aprended de mí, que soy humilde y manso de corazón, y entonces allaran descanso para lo que es sus almas. “Porque lo que es mi yugo es fácil”, “y ligera mi carga”.
Reflexion del santo evangelio de hoy:
El Evangelio del día, según San Mateo 11, 25-30, nos presenta una reflexión profunda sobre el conocimiento divino y el descanso que Jesús ofrece a aquellos que se acercan a Él.
En primer lugar, Jesús agradece al Padre por revelar su sabiduría a los pequeños, en contraposición a los sabios y entendidos. Esta es una llamada a la humildad y la apertura de mente, a reconocer que el conocimiento divino no está limitado a aquellos que se consideran expertos o eruditos en la materia, sino que está abierto a todos aquellos que se acercan a Dios con humildad y sinceridad.
Además, Jesús revela que todo le ha sido entregado por el Padre, y que nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Esto significa que la relación entre Jesús y el Padre es única y especial, y que sólo a través de Él podemos conocer la verdadera naturaleza divina.
Por último, Jesús invita a todos aquellos que están cansados y agobiados a acudir a Él para encontrar descanso. Él ofrece su yugo, que es llevadero, y su carga, que es ligera. Esto significa que, a pesar de los desafíos y dificultades que enfrentamos en nuestra vida diaria, Jesús está dispuesto a ayudarnos y a guiarnos para que podamos encontrar la paz y el descanso que tanto necesitamos.
En resumen, el Evangelio del día nos invita a ser humildes y abiertos a la sabiduría divina, a buscar a Jesús como el único camino hacia el conocimiento del Padre, y a confiar en Él para encontrar el descanso y la paz que necesitamos en nuestra vida. Que estas palabras de Jesús nos animen a seguir creciendo en nuestra fe y a acercarnos cada vez más a Él.