XXX semana del Tiempo Ordinario:
Lecturas de hoy 4 de noviembre 2023.
Primera lectura de hoy de la carta del apóstol san Pablo a los ‘Romanos 11,1-2a.11-12.25-29’.
Hermanos: Déjenme preguntarles: ¿Ha abandonado Dios a su pueblo? nunca. Porque yo también soy israelita, descendiente de las tribus de Abraham y de Benjamín. Dios no rechaza a su pueblo porque lo haya elegido. Os pregunto de nuevo: ¿Cayeron los judíos alguna vez y nunca más se levantaron? En absoluto, porque su caída condujo a la salvación de los gentiles, lo que provocó que los judíos hicieran lo mismo.
Si su caída fue riqueza para el mundo y pobreza para los gentiles, ¿qué importancia tenía para todos los judíos abrazar plenamente la fe? Hermanos, no quiero que pierdan de vista el plan de Dios detrás de todo esto, para que no anden jactándose. La ceguera de una parte de los israelitas continuará hasta que todos los gentiles vengan a la fe, y entonces todos los israelitas serán salvos, como dice la Biblia:
El Salvador vendrá de Sion y sacará a Israel de Israel. Haré un pacto con ellos cuando quite su pecado. Por tanto, en cuanto al evangelio, los judíos son enemigos, y a vosotros os conviene; pero en cuanto a los elegidos de Dios, le son muy queridos por respeto a los patriarcas, porque Dios no se arrepentirá. sus dones o elecciones.
Salmo responsorial de hoy 93,12-13a.14-15.17-18. El Señor no rechaza a su pueblo.
Dichoso el hombre a quien tú educas,
al que enseñas tu ley,
dándole descanso tras los años duros.
El Señor no rechaza a su pueblo.
Porque no rechaza el Señor a su pueblo,
ni abandona su heredad:
el juicio retornará a la justicia,
y la seguirán todos los justos de corazón.
El Señor no rechaza a su pueblo.
Si el Señor no me hubiera auxiliado,
ya estaría yo habitando en el silencio.
Cuando pensaba que iba a tropezar,
tu misericordia, Señor, me sostenía.
Evangelio del dia de hoy:
Lectura del santo evangelio según san ‘Lucas 14, 1. 7-11’.
Un sábado, Jesús fue a comer a casa de un líder de los fariseos que lo vigilaba. Cuando vio a sus invitados elegir su primer lugar, les contó esta historia: Cuando os inviten a un banquete de bodas, no os sentéis en el asiento principal, no sea que haya otro invitado más importante que vosotros.
El que os invitó vendrá y dirá: “Haced sitio para esa persona. Tienes que ir solo y ocupar el último lugar avergonzado. En cambio, cuando te inviten, toma el último lugar, para que cuando venga el que te invita, te diga: “Amigo, llega hasta el final”. Entonces lucirás honrado frente a todos tus invitados. Porque el que se enaltece será Deshonrado, y el que se humilla será enaltecido.”
Reflexión del evangelio de Lucas 14, 1. 7-11:
En el evangelio de Lucas 14, 1. 7-11, Jesús nos enseña la importancia de la humildad y la modestia. En lugar de buscar los primeros lugares en un banquete, Jesús nos aconseja que ocupemos el último lugar. De esta manera, cuando el anfitrión nos invite a sentarnos en un lugar más destacado, nos sentiremos honrados y respetados.
La humildad es una virtud que se valora en todas las culturas y religiones. La humildad nos ayuda a ser más compasivos y empáticos con los demás, y a reconocer que todos somos iguales ante los ojos de Dios. Al ser humildes, podemos aprender de los demás y crecer como personas.
En nuestra vida cotidiana, podemos practicar la humildad de muchas maneras. Podemos escuchar a los demás con atención y respeto, sin juzgarlos ni criticarlos. Podemos reconocer nuestros errores y pedir perdón cuando sea necesario. Y podemos tratar a todos con amabilidad y compasión.
En resumen, la lectura del evangelio según san Lucas 14, 1. 7-11 nos recuerda la importancia de la humildad en nuestras vidas. Al ser humildes, podemos ser más compasivos y empáticos con los demás, y crecer como personas. Que Dios nos ayude a ser más humildes cada día. Le dejamos una linda alabanza para que la escuchen…
