Lecturas de hoy martes 8 de noviembre 2022.
Primera lectura de hoy de la carta del apóstol san Pablo a Tito 2, 1-8. 11-14.
Querido hermano: Aprende lo que está en armonía con la sana enseñanza: los ancianos deben ser sobrios, respetables, razonables, seguros de sí mismos, amorosos y pacientes. Deja que la vieja haga lo mismo, pórtate bien, no parlotees, no bebas alcohol; dar ejemplo, enseñar a las mujeres jóvenes a amar a sus esposos e hijos, a ser racionales, castas, sobrias, a amar sus hogares, a ser amables con sus esposos y a hacer que la gente se sienta menos y cansada del evangelio. También anime a los jóvenes a ser razonables en todo y déles un buen ejemplo.
Cuando enseñes, hazlo con verdad y respeto, en un lenguaje sano y sin tacha, para que el adversario pueda retroceder y hablar mal de nosotros. Porque se ha manifestado la gracia de Dios, que salva a todos y nos enseña a renunciar a la vida sin deseos religiosos y mundanos, para que desde ahora podamos vivir sabia, justa y fielmente a Dios y esperar en el gran Dios y Salvador. Cristo Jesús, nuestra esperanza, viene en gloria. Él se entregó por nosotros para redimirnos de todo pecado y purificarnos para que seamos transformados en su pueblo, celosamente decididos a hacer el bien.
Salmo responsorial de hoy 36, 3-4. 18 y 23. 27 y 29. Los justos es quien salva El Señor.
Confía en el Señor para hacer el bien:
Vivirás en tu tierra y descansarás fielmente en ella;
Que el Señor te haga feliz,
todo lo que desea tu corazón el te dará.
Los justos es quien salva El Señor.
El Señor provee los días buenos,
Su propiedad vivirá para siempre.
El Señor guarda los pasos de los hombres,
Le gusta su manera.
Los justos es quien salva El Señor.
apártate del mal y haz el bien
Siempre serás dueño de la casa.
Los justos son dueños de la tierra,
Vivirán allí para siempre.
Evangelio de hoy 8 de noviembre 2022.
Lectura del santo evangelio según san Lucas 17, 7-10.
En aquel tiempo, Jesús habló y dijo a sus apóstoles: “¿Quién de todos vosotros tiene a un siervo que está arando el campo o está apacentando las ovejas, y cuando vuelve del campo le dice: Entrad y comed?, “Prepárenme para comer, preparadme para servirme , para que yo coma y también beba, y tú también comas y bebas? ¿Tenía que agradecer al camarero por cumplir con su deber? Asimismo, cuando hayas hecho lo que se te ha mandado, di: “Solo somos siervos, solo hacíamos lo que teníamos que hacer”.
Comentario de la lectura del dia de hoy:
la lectura del día de hoy dice que ¿Cómo sabemos si realmente tenemos fe, es decir, que nuestra fe, aunque sea insignificante, es real, pura y directa? Jesús nos lo dejó claro al decirnos cuál es la medida de la fe: el servicio. Lo hace con una alegoría, que a primera vista es un poco inquietante porque crea la imagen de un maestro dominante e indiferente. Pero el mismo comportamiento del amo destaca el verdadero foco de la parábola, que es la actitud disponible del siervo.
Jesús quiso decir con esto que una persona de fe en su relación con Dios es así: está completamente sujeta a su voluntad, sin cálculo ni vanidad. El final de la parábola nos confronta con nuestra propia realidad. Todo lo que tenemos ahora y tenemos es gratis. Dios, protagonista de nuestra historia y de nuestra vida, nos ha dado el gran don de la fe para conocerlo, vivir en él y servir a los demás. Haciendo lo que debemos hacer y sin esperar nada, no pensamos que hemos obtenido derechos, sino sólo gracia.