Lecturas de hoy martes 12 de julio 2022.
Primera Lectura del libro de Isaías 7, 1-9.
Cuando reinaba Ajaz, hijo de Jotam, hijo de Uzías, reinaba sobre Judá, Rajón, rey de Aram, y Peka, hijo de Remalías, rey de Israel, vinieron a Jerusalén para atacarlo, pero no pudieron controlarlo. Cuando llegó la noticia al heredero de David de que los sirios estaban apostados en Efraín, su corazón y el corazón del pueblo temblaron, y los árboles del bosque temblaron con el viento. Entonces el Señor le dijo a Isaías: “Ve a encontrarte con Acaz tu hijo Sir-Yeshub, donde termina el canal del estanque superior, junto a su puente está lleno, y dile: Presta atención, pero cálmate, no tengas miedo.
De este par de tizones humeantes, no temas la ira de Rashon, rey de Siria Pekah, rey de Israel. No importa cuando planeen destruirte y digan: Atacamos a Judá, cerquémosla, conquistémosla y hagamos rey sobre ella a Ibn Tabil. Así dijo el Señor: “Esto no sucederá. Damasco es la capital de Siria y Rasun, el rey de Damasco. Samaria era la capital de Efraín y el hijo de Ramani, rey de Samaria. Pues bien, en sesenta y cinco años Efraín perecerá y no volverá como pueblo. Y si no creéis en mí, también vosotros iréis a la ruina. “
Salmo: 47, 2. 3-4. 5-6. 7-8 Dios ha fundado para siempre su ciudad.
El Señor es grande
y gran digno de alabanza
en la ciudad de nuestro Dios,
su santa montaña, hermosa altura,
la tierra de toda alegría.
El monte Sión, confín del cielo,
la ciudad del gran rey;
entre sus palacios,
como un alcázar Dios descuella.
Mirad: se aliaron los reyes
para atacarla juntos;
pero, al verla, quedaron aterrados
y huyeron despavoridos.
Allí los agarró un temblor
y dolores como de parto;
como un viento del desierto,
que destroza las naves de Tarsis.
Evangelio de hoy martes 12 de julio 2022 – evangelio según san Mateo 11, 20-24
En este momento, Jesús comenzó a censurar a las ciudades que presenciaron muchos de sus milagros por no arrepentirse. Él les dijo: “¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si hubieran sucedido los milagros que se hicieron entre ustedes en Tiro y en Sidón, hace mucho tiempo que habrían hecho penitencia, cubiertos con toallas y ceniza. “
Pero les aseguro que el Día del juicio será menos difícil para Tiro y Sidón que para ustedes. Y tú, Cafarnaúm, ¿crees que has ido al cielo? número. Serás arrojado al abismo, porque si los milagros que ocurrieron en ti fueron hechos en Sodoma, probablemente permanecerán así hasta el día de hoy. Pero les digo que el Día de la Resurrección será menos difícil para Sodoma que para ustedes.
Comentario del evangelio de hoy
El día de hoy es una oportunidad para que nos miremos en el espejo y seamos honestos con nosotros mismos, adhiriéndonos a la frase: “Ay de ti, ay de ti”, ya que he invertido tanto en ti, te he dado tanto de mí mismo y te he elegido para ser cristiano. Has elegido vivir una existencia mediocre y superficial, un poco de espiritualidad y de aureola. Es cierto que tenemos un poco de cristianismo y agua bendita, pero eso es todo. Al vivir así, estamos alejando a Jesús de nuestro corazón. Cuando fingimos que Jesús está con nosotros, en realidad lo estamos alejando. Estamos orgullosos de ser cristianos, pero vivimos como paganos.
Conclusión.
Si una persona está luchando con una adicción y está atrapada en un ciclo de pecado, no está viviendo bien. Y cuando una persona vive bien, apunta a Jesús. Cuando una persona vive bien, significa que es capaz de tomar decisiones sabias, capaz de amar a los que le rodean, capaz de empatizar con los demás y capaz de ver las situaciones con precisión.
Esto no es fácil. Una vez que una persona ha elegido seguir a Jesús, siempre correrá el riesgo de caer en desgracia, lo que puede dificultar las cosas. Lo mejor que puede hacer un cristiano para asegurarse de que vive bien es responder a la llamada de Dios a vivir con fidelidad, ya sea en cosas pequeñas como guardar el móvil antes de acostarse, o en cosas grandes como estar dispuesto a sacrificarlo todo por Dios.
