La idea de esta oración a la madre de dios es cumplir con los deberes maternales a través de la oración que parece obvia cuando se piensa en ella desde una perspectiva antropológica. Sin embargo, muchas personas encuentran consuelo en creer que tienen una madre divina que los ama incondicionalmente. La forma en que una madre ama a su hijo a menudo se muestra a través de la oración pidiendo a dios su protección.
Ella quiere lo mejor para su hijo y hará lo que sea necesario para que eso suceda. Desde la infancia es cuando un niño aprende qué emociones son aceptables y cuáles no, la oración ayuda a ese proceso antes de que los niños pongan un pie en la edad adulta pongamos en practica esta oración a la madre de Dios.
Ante ti Madre de Dios, vengo como un hijo
Madre de Dios, vengo a ti esta noche como un hijo llega a su madre después de un largo día para hablar contigo y sentir tu amor y consuelo.
Virgen María, te agradezco tu infinito amor por mí y por todas las personas. Porque siempre a nuestro lado, escuchando y orando por nuestro hijo.
Ore siempre por el perdón de nuestros pecados y necesidades. Santa Madre, te amo; esta noche te pido que protejas a mi familia, cúbrelos con el manto de tu amor y dulzura de madre, déjalos dormir en paz, dejar sus problemas a un lado y creer que mañana será un nuevo día, nuevas oportunidades y soluciones por sí mismos.
Virgen, te pido que llenes de amor mi hogar y mi vida, para que tu presencia y tu protección se sientan cada día en todos los aspectos de mi vida y con los que amo. Virgen María, Madre nuestra, te pido:
Cuando cayó la noche, la oscuridad del cielo disipó la oscuridad de la tierra.
Que cada mañana nos traiga una nueva esperanza. Que vivamos cada día con más amor en nuestros corazones.
Bendíceme y protégeme de todo mal. Amén.
Esperamos que esta linda oración a la madre de Dios haya sido de mucha bendición a cada uno de nosotros como familia de Dios y hijos de la madre santísima, practiquen cada día las oraciones para que así estemos mas cerca del padre celestial y que nuestros pecados sean perdonados por el amen.
