Lecturas de hoy miércoles 22 de marzo 2023.
Lecturas de hoy 22 de marzo 2023.
Primera lectura de hoy del libro de “Isaías 49, 8-15”.
Así dijo el Señor: “«Te oiré en tiempos de la misericordia», En el día de la salvación te ayudé. Yo te creé, te hice la unión de los pueblos: restaurar la tierra, retomar la patria destruida, Dile al prisionero: “¡Sal!” Di a los que están en la oscuridad: “Vengan a la luz”. Pastarán en todos los sentidos, Incluso encontrarán hierba en las dunas del desierto. No tienen hambre ni sed. Ni el sol ni el calor les molesta, a los que tienen misericordia de ellos.
Se los llevará con él en la primavera. Convertiré todas las montañas en caminos. Ellos cubrirán mi camino. He aquí, vienen de lejos; los del norte y del oeste, y otros de la tierra de Senim. ¡Alégrate, cielo, alégrate, tierra! romper en canciones, montañas. Porque el Señor consuela a su pueblo. Ten piedad de los desamparados. «Y dice Sion»: “«Me ha dejado en abandono», «El Señor». El Señor me ha olvidado. ¿Puede una madre olvidar su biografía? ¿Hasta que ya no lo toque su hijo visceral? Aunque hay una madre que se olvida. Nunca te olvidaré” dijo el Señor de los ejércitos.
Salmo Responsorial de hoy 144. Es clemente y misericordioso, El Señor.
El Señor es clemente y misericordioso,
En piedad rico y lento a la ira;
el Señor es bueno con todos,
es cariñoso con todas sus criaturas.
Es clemente y misericordioso, El Señor.
El Señor es fiel a sus palabras,
bondadoso en todas sus acciones.
A los que van a caer, El Señor sostiene,
endereza a los que ya se doblan.
Es clemente y misericordioso, El Señor.
En todos los caminos, del Señor es justo,
es bondadoso en todas sus acciones.
De los que le suplican, cerca está el Señor,
de los que lo invocan sinceramente.
Lectura del santo evangelio según san “Juan 5, 17-30”.
En esos días, Jesús les hablo y dijo a los judíos «que lo perseguían los sábados para curarlo»: «Mi Padre por siempre trabaja, y yo también trabajo». Así que los judíos estaban más decididos a matarlo porque no solo estaba quebrantando el sábado. , sino que también llamó a Dios Padre, haciéndose así igual a Dios. Entonces Jesús les dijo con estas palabras: “De cierto os digo, el Hijo no puede hacer nada sino lo que ve hacer al Padre, y todo lo que hace el Padre, también lo hace el Hijo.
«Ama el Padre al Hijo», y lo demuestra. A ti Todo lo que haga, te sorprenderá mostrándote algo más grande que estos. Y por cuanto resucita el Padre a los muertos y les da vida, y así es como el Hijo da vida a quien Él quiere. A nadie El Padre juzgara, «porque todo juicio ha sido encomendado al Hijo», «para que todos lo honren al Hijo y al Padre».
Quien al hijo no honra también no honra al Padre. Les aseguro que todo el que escuchan mis palabras y realmente cree en el que me envió, vida eterna ya tiene y entonces no será condenado, porque ha pasado de muerte a vida. «Les aseguro que llegará el tiempo» y entonces ya esta aquí el tiempo en que los muertos escucharan la voz del Hijo de Dios y los que la oigan resucitarán.
Como el Padre tiene vida en sí mismo, así ha dado al Hijo vida en sí mismo. y autoridad le dio para juzgar, y «por cuanto es el Hijo del Hombre». No os maravilléis de esto, porque llegará el tiempo en que todos los que están en sus sepulcros oirán mi voz y se levantarán: los que han hecho buenas obras en la vida; los que han hecho el mal serán castigados. No puedo hacer nada yo mismo. Después de lo que he oído, juzgo, y mi juicio es justo, porque no busco a los míos, sino al que me envió.”
Reflexión del santo evangelio de hoy:
El evangelio según san Juan relata la historia de Jesús, quien en su tiempo fue perseguido por los judíos debido a que violaba la ley del sábado al hacer curaciones en ese día. Sin embargo, Jesús hace una afirmación sorprendente al decir que su Padre trabaja siempre y él también trabaja, lo que enfureció aún más a los judíos, ya que al llamar a Dios su Padre, se igualaba con Él.
En su respuesta, Jesús aclara que el Hijo no puede hacer nada por sí solo y sólo hace lo que ve hacer al Padre. De esta manera, el Padre le manifiesta todo lo que hace, y le manifestará obras aún mayores para asombro de todos. Además, Jesús afirma que, al igual que el Padre resucita a los muertos y les da la vida, él también tiene el poder de dar la vida a quien él quiera dársela.
Jesús también señala que el Padre no juzga a nadie, sino que todo juicio se lo ha dado al Hijo, para que todos honren al Hijo como honran al Padre. Quienes escuchan la palabra de Jesús y creen en el que lo envió tienen vida eterna y no serán condenados en el juicio.
En definitiva, este pasaje del Evangelio nos muestra la profunda relación que existe entre Dios Padre y Jesús, y nos invita a reflexionar sobre cómo podemos seguir el ejemplo de Jesús al buscar siempre la voluntad de Dios en nuestras vidas. También nos anima a confiar en el poder de Jesús para darnos vida eterna y a no temer el juicio, siempre y cuando escuchemos su palabra y creamos en el que lo envió.
