La Oración a la Sagrada Familia nos inspira a contemplar el amor verdadero y la unidad en el contexto familiar. A través de Jesús, María y José, se nos muestra cómo nuestras familias pueden convertirse en pequeñas iglesias domésticas, donde la oración y la comunión son fundamentales. Esta oración nos invita a valorar la importancia de la familia y su papel en el plan divino.
Oración a la Sagrada Familia:
Jesús, María y José
en vosotros contemplamos
el esplendor del verdadero amor,
a vosotros, confiados, nos dirigimos.
Santa Familia de Nazaret,
haz también de nuestras familias
lugar de comunión y cenáculo de oración,
auténticas escuelas del Evangelio
y pequeñas iglesias domésticas.
Santa Familia de Nazaret.
Que en las familias nunca más haya ocasiones de violencia,
de cerrazón y división;
que quien haya sido escandalizado o ya sea herido,
que sea curado pronto y que también sea consolado.
Santa Familia de Nazaret,
haz tomar conciencia a todos
del sagrado carácter e intangible de la familia,
de su preciosidad en el proyecto de Dios.
Jesús, María y José,
escuchad, acoged nuestra súplica.
Amén.
En resumen, la Oración a la Sagrada Familia nos recuerda que nuestras familias son sagradas y preciosas. Debemos esforzarnos por construir relaciones basadas en el amor, la comprensión y la unidad, siguiendo el ejemplo de Jesús, María y José. Que esta oración nos ayude a tomar conciencia de la importancia de la familia en el proyecto de Dios y a buscar su guía y protección en nuestras vidas familiares. Amén.