El evangelio de hoy domingo 17 de julio 2022

por LaFeCatolica
Evangelio de hoy domingo 17 de julio 2022

Lecturas de hoy domingo 17 de julio 2022.

Primera lectura del libro del Génesis 18, 1-10a.

Un día, el Señor se le apareció a Abraham en un roble en Mumbar. Ibrahim estaba sentado a la puerta de su tienda bajo el calor sofocante. Mirando hacia arriba, de repente vio a tres hombres parados frente a él. Al verlos, se apresuró hacia ellos desde la entrada de la tienda, y se postró en tierra, diciendo: “Señor, si veo gracia en tus ojos, te pido que no me pases sin detenerte. Otra vez”.

Les haré traer agua para lavarse los pies y descansar bajo la sombra de estos árboles. Les traeré pan para que recuperen sus fuerzas y después de eso continúen su camino, por lo que seguramente deben pasar a través de su siervo” Ellos respondieron: “Está bien. Haz lo que dices. “Abraham avanzo a prisa a la tienda en donde estaba Sarah su esposa y le dijo: ‘apúrate, en tomar las tres yardas de masa, y empieza a cocer algunos panes'”.

Entonces Abraham corrió al establo, tomó un becerro, se lo dio a un sirviente para que lo matara y lo vistió. Cuando el becerro estuvo cocido, tomó el queso y la leche fresca y los presentó a los extraños. Se paró con ellos debajo del árbol mientras comían. Le preguntaron: Sara, ¿dónde está tu mujer? Hay en la tienda. Alguien le dijo: “Dentro de un año, sin falta y seguramente volveré a visitarte en ese día; para entonces, Sara, tu esposa, ya habrá tenido un hijo.

Salmo: 14, 2-3ab. 3cd-4ab.5. ¿quién Señor puede hospedarse en tu tienda?

El que procede honradamente
y practica la justicia,
el que tiene intenciones leales
y no termina con su lengua.

Y quien no hace mal a su prójimo
ni calumnia al vecino,
el que considera despreciable al malvado
Pero honra a los que temen al padre.

El que no presta dinero a usura
ni acepta soborno contra el inocente.
nunca fallará el que así obra.

Segunda lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 1,24-28.

Hermanos: Ahora me gozo en mis padecimientos por vosotros, para cumplir en mi cuerpo lo que falta a los padecimientos de Cristo, en lugar de su cuerpo, que es la Iglesia que la sierva de Dios me ha designado, según la tarea que me ha sido encomendada.

Yo soy por vosotros: para completar la palabra de Dios, el secreto ha estado oculto durante siglos y generaciones, y ahora es revelado a sus santos, a quienes Dios quisiera revelar la verdad. La riqueza de la gloria de este misterio entre las naciones, es decir, Cristo en vosotros, la esperanza de gloria. Declaramos que Cristo; Aconsejamos a todos, y enseñamos a todos, con todos los recursos de la sabiduría, para presentar todos plenamente en Cristo.

Evangelio de hoy domingo 17 de julio 2022 – evangelio según San Lucas 10,38-42.

En ese momento, Jesús entró en una ciudad, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Tenía una hermana, su nombre era María, que se sentó a los pies de Jesús y comenzó a escucharlo. Por otro lado, Marta estaba ocupada haciendo varios quehaceres de la casa, por lo que cuando se acercó a Jesús, le dijo: “Señor, ¿no te diste cuenta que mi hermana me dejó sola con todas las tareas de la casa?, dile que me ayude”. Y respondió el Señor: “Marta, Marta, por muchas cosas te inquietas y te preocupas, aunque una sola cosa sea necesaria. María ha elegido la mejor parte y nadie se la llevará”.

Comentario del evangelio de hoy

Es la voz del Señor la que debemos escuchar para hacer bien las cosas que la vida nos exige, según Jesús. En esta escena del libro de Lucas, se representa al creyente permaneciendo a los pies de Jesús para escucharlo y estar en sintonía con él. Se trata de hacer una breve parada durante el día para recogerse en silencio durante unos minutos, para que el Señor “pase” y podamos quedarnos un poco “a solas” con Él, volviendo después a la vida cotidiana con serenidad y eficacia. Jesús parece decirnos a cada uno de nosotros:

“No os dejéis llevar por vuestras actividades cotidianas; ante todo, escuchad la voz del Señor, para realizar bien las cosas que la vida os pide”. María eligió la ‘parte buena’ y fue alabada por Jesús, que parece estar repitiendo este mensaje para nosotros: ‘No os dejéis distraer por vuestras acciones diarias; ante todo, escuchad la voz del Señor, para poder cumplir con vuestras tareas cotidianas’.

Conclusión

Cuando miramos la vida de Jesús, su vida está marcada por una búsqueda constante del sentido de la vida. La búsqueda no es de un sentido esotérico de la vida, sino del sentido de la vida en toda su cotidianidad, en toda su realidad. Porque Jesús descubrió que toda la vida consiste en dos cosas: relacionarse y hacer el bien. Y en cuanto a cómo nos relacionamos con los demás y cómo ayudamos a los demás, eso es lo que viene a enseñarnos.

Hay muchos momentos en la vida de Jesús en los que debió decirse a sí mismo: “¿Por qué estoy haciendo esto?” Innovó, rompió las reglas, evangelizó, curó, fue a la gente, enseñó, aconsejó, ministró, amó, caminó hasta altas horas de la noche, rezó. Y lo hizo todo a la sombra de la muerte. Por eso la Iglesia ha dicho: “La vida de Jesús es un misterio que sólo se puede comprender después de la muerte”. Sólo cuando hayamos muerto y salido de la tumba podremos ver realmente la plenitud de la vida de Jesús y asombrarnos de ella.

La verdad es que nunca podremos vivir verdaderamente la vida de Jesús hasta que él nos llame a ello, y hasta que respondamos abiertamente a la llamada. Es como tener la llave de una magnífica mansión que no es nuestra, que nunca podremos usar, que es demasiado hermosa para que nos acerquemos. Eso es lo que espera el Espíritu Santo

Related Posts

Deja un comentario

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer Más

Adblock detectado

Ayúdenos deshabilitando su extensión AdBlocker de sus navegadores para nuestro sitio web.